Marilu Carrillo
Siempre he dicho que la educación es la llave maestra para abrir las puertas del progreso. Así que siempre me he involucrado en la educación y más al tratarse de mis hijas, cuando llegue a Las Vegas, no conocía a nadie, desconocía que programas existían y como eran las escuelas.Mi mayor preocupación era el que fuera accesible para nosotros tanto económica como socialmente, mi hija mayor asistió a escuelas públicas, y aunque fue una excelente estudiante, yo quería algo mejor para ella.
En 2003 no había mucha información y no fue hasta 2008 que descubrí las opciones de escuelas Magnet por lo que aplique para una de mis hijas, actualmente acude a DSA HS y después en 2018 la más pequeña por fin fue admitida en Lomie G. Heard Elementary School otra excelente escuela magnet, inmediatamente se ven los resultados y avances, sus pensamientos, enfoque y análisis, la forma tan resolutiva con la que enfrentan retos y una mejor visión de su futuro.
Lo que me permiten comprobar que fue la mejor decisión, sin embargo a pesar de ello mi hija Daniella la más pequeña tuvo muchas dificultades para aprender este año pasado con la pandemia, es ahí donde investigue que otras opciones pudiéramos tener, que sería la mejor manera de ella para aprender, aunque tengo una bella experiencia con maestros y personal de las escuelas a las que han asistido mis hijas, vi que 2020 había sido un año bastante difícil no solo en la salud, ni social sino escolarmente.
Escuche sobre la beca de oportunidades y las escuelas Chárter, pero mi alegría se desvaneció cuando supe que se habían recortado los beneficios, supe que debíamos de actuar así que me uní con mi firma y la de varios padres a la voz de una proposición por parte de activistas como Valeria Gurr para que se volvieran a otorgar las Becas de Oportunidades, porque todos tenemos el derecho a la mejor educación, sin importar tu estatus económico, o migratorio, raza, etc, debemos de capacitar a las mujeres y a los hombres que liderarán nuestro mundo el día de mañana, como personas gratas a la sociedad, empáticas y constructoras de vidas.
Afortunadamente se abrieron las becas nuevamente y hoy por hoy mi hija más pequeña empezó a recibir educación académica en una escuela Chárter y confío que también ha sido una acertada decisión de nosotros como padres.
Gracias a los líderes y organizaciones quienes han hecho posible esta realidad y por escuchar nuestras voces.
Todos los niños tienen el derecho a una educación académica basta y de excelencia, y no todos los padres contamos con los suficientes recursos para otorgarles dicho nivel académico, lo que resulta en rezago social, debemos empoderarlas a nuestra niñez, para que sean el día de mañana hombres y mujeres que lideren en base a valores morales, conocimientos, y aptitudes esta sociedad que día a día evoluciona y se reconstruye, eso es el progreso y eso es lo que necesita una nación. Para mi la educación académica que hemos podido obtener en estas escuelas es muy satisfactoria, promoviendo el trabajo en equipo, liderazgo y multidisciplinario, permite que los muchachos adquieran diferentes capacidades y las pongan tempranamente en práctica.
— English translation below.
I have always believed that education is the key to opening the doors of progress. That’s why I have always been involved in education when it comes to my daughters. When I first moved to Las Vegas, I did not know anyone. I did not know what education programs existed and what the schools were like. My biggest concern was making a good education accessible to us both economically and socially.
My oldest daughter attended public schools, and although she was an excellent student, I wanted something better for her. In 2003, there was not much information about education alternatives. It was not until 2008 that I discovered magnet schools, and I applied for one of my daughters. She was accepted.
She currently attends DSA HS, and my youngest was admitted to Lomie G. Heard Elementary School, which is another excellent magnet school. I immediately saw the results and progress in their thought processes, focus, and the decisive ways in which they faced challenges. This made it clear that I made the right decision to put them both in magnet schools.
However, despite all of this, my daughter Daniella, the youngest, had many difficulties learning this past year because of the pandemic. That is why I looked into other possible options, which would be the best way for her to learn. Although we have had great experiences with the teachers and staff of the schools my daughters have attended, I saw that 2020 had been a very difficult year, not only in health but socially and in school.
I heard about the Opportunity Scholarship and charter schools and was excited about this opportunity, but quickly my joy faded when I learned that the Opportunity Scholarship was closed to new students. I knew that we had to act, so I joined by signing a petition with several parents to raise our voices to activists like Valeria Gurr, and luckily, the Opportunity Scholarships were opened again.
We should have the right to the best education, regardless of our economic, racial, or immigration status. We must train the women and men who will lead our world tomorrow, as people who are empathic and will guard the future. Fortunately, the scholarships were opened again and my youngest daughter started attending a charter school and excelling. I believe that it has also been a wise decision for us as parents.
“All children have the right to an excellent academic education, but not all parents have the resources to grant them the best setting.”
Thanks to the leaders and organizations who have made this reality possible and for listening to our voices. All children have the right to an excellent academic education, but not all parents have the resources to grant them the best setting. We must empower our children so that they become the men and women who will lead based on moral values, knowledge, and skills that are needed so that the society evolves and rebuilds every day; that is progress and that is what our nation needs. For me, the academic education that we have been able to obtain in these schools is very satisfactory, as they promote teamwork, leadership, and multidisciplinary skills. It allows the children to acquire different capacities and put them into practice early.