Iniciativa de ley busca que familias de Georgia tengan más opciones escolares
Articulo publicado por: Valeria Gurr*, especial para El Nuevo Georgia
Más de 20 estados han aprobado leyes en el último año para crear, mejorar o ampliar los programas de opciones escolares a través del país. Y el 2022 ya ha tenido un buen comienzo con 29 estados que han presentado legislación para hacer lo mismo.
Georgia es uno de los estados trabajando arduamente para brindar opciones escolares a las familias que más lo necesitan. Actualmente, Georgia tiene dos programas de opciones escolares, pero estas iniciativas solo atienden al 1% de los casi dos millones de estudiantes en el estado.
Es por lo que este año Georgia busca ampliar las opciones escolares para que más estudiantes tengan acceso a recursos educativos y un ambiente de aprendizaje que satisfaga sus necesidades.
Los resultados académicos de los estudiantes de la comunidad Hispana están aún muy por debajo en comparación a los estudiantes blancos. Un estudio realizado por The Nation’s Report Card encontró que los estudiantes Hispanos de K-12 grado tuvieron un puntaje de 23 puntos más bajo que los estudiantes blancos en sus calificaciones. Es de esperar que la pandemia solo empeoro esta situación.
El proyecto de ley 999 de la Cámara de Representantes, la Ley de Libertad Educativa de Georgia, y el proyecto de ley 60, la Ley de Becas Educativas de Georgia, son las dos medidas que brindan a los estudiantes y las familias la oportunidad de progresar.
Con tantos residentes en el estado desatendidos por el sistema educativo actual, las opciones adicionales y una mayor libertad para elegir la mejor educación para sus hijos es un derecho fundamental que los padres deben ejercer.
Por ejemplo, la HB 60 establece un programa para niños en hogares de crianza y militares, así como para estudiantes con necesidades especiales y aquellos de hogares que ganan menos del 400 por ciento del nivel federal de pobreza. Además, extiende vales a niños que asistieron a escuelas públicas durante un semestre, pero que no ofrecieron educación presencial.
Ambos proyectos de ley ofrecerían hasta $6,000 en fondos de becas para que los estudiantes de Georgia asistan a las escuelas privadas aprobadas de su elección cada año. Mas haya, los fondos podrían utilizarse para cubrir el precio de los libros, tutoría, transporte, computadoras y otros equipos autorizados, cursos de inscripción dual y tratamientos y servicios educativos.
El patrocinador de ambos proyectos de ley, el Representante Wes Cantrell, señaló: “Ya es hora de que Georgia mire de nuevo cómo educamos a nuestros hijos. ¡Una talla no sirve para todos! Debemos cambiar el enfoque lejos de los sistemas y enfocarnos en el estudiante. Esto significa que debemos financiar a los estudiantes, no a los sistemas”.
La realidad es que a lo que se refiere el Representante Cantrell es un problema creciente en los Estados Unidos. No todos los niños se desempeñan bien en el ambiente tradicional de la escuela pública, y todos los niños merecen el derecho de encontrar lo que mejor les funcione.
Un ejemplo palpable
Si no me cree, mire lo que tiene que decir Jamariya Clayton, una estudiante de Georgia que actualmente participa en el programa de crédito fiscal por elección de escuela: “Fui a la escuela pública y realmente no me gustó porque no podía aprender uno-a-uno y había demasiadas distracciones a mi alrededor. Pero, cuando llegué a Bright Futures, tuve suficiente tiempo para hacer mi trabajo y no hay tantas distracciones porque la escuela no es tan grande”.
El testimonio de Jamariya demuestra por qué el Representante Cantrell está defendiendo estos importantes proyectos de ley: “[Georgia] tiene que admitir que incluso cuando nuestras escuelas públicas hacen un excelente trabajo, lo que a menudo hacen, incluso en esas y en las mejores circunstancias, habrá un pequeño porcentaje de estudiantes que no se desempeñen bien en el ambiente tradicional del aula y necesitan un entorno de aprendizaje diferente”.
Los estudios han demostrado que los programas de opciones escolares ayudan a los estudiantes lograr el éxito. El Urban Institute emprendió una serie de investigaciones para examinar los efectos a largo plazo de los programas de opciones escolares privadas y los resultados de los estudiantes.
De seis estudios que analizan el nivel educativo de los participantes del programa, cuatro encontraron resultados positivos para la muestra completa o para al menos una sub-muestra de estudiantes analizados.
Por otro lado, dos no encontraron un impacto notable para ningún grupo de estudiantes. Ninguno de estos estudios descubrió resultados educativos adversos para todos o un subconjunto de los estudiantes.
A medida que continuamos lidiando con la pandemia, las familias han reconocido, ahora más que nunca, la importancia de permitir el financiamiento educativo para estudiantes y no para las instituciones.
Los padres se han dado cuenta de la realidad de que el empoderamiento sobre la educación de sus hijos es la diferencia entre el éxito o el fracaso. Y devolviendo el poder a los padres, los que mejor conocen a sus hijos, garantizará un futuro próspero para las generaciones venideras.
Los georgianos deben unirse y empujar a sus legisladores para que voten por las opciones escolares no como una cuña política, sino como un tema que puede superar la política, para que nuestros niños tengan éxito.
– Valeria Gurr se desempeña como directora de relaciones de asuntos externos para la Federación Americana para los Niños. Anteriormente, Gurr fue coordinadora y administradora de los programas del Instituto de Investigación y Política Infantil de Nevada, y es una defensora apasionada de las opciones educativas, particularmente para las familias desfavorecidas. Para mas información, visite: https://www.federationforchildren.org